Masaje de los meridianos


photos by Kimi Palme

"Acht Wundermeridiane", Dr. Achim Eckert

Es una técnica que estimula el flujo de la energía vital Qì en los meridianos (las vías energéticas del cuerpo). La medicina tradicional china con su doctrina de los Cinco Elementos y los respectivos meridianos de órganos con puntos de acupuntura tiene varios milenios de antigüedad. A diferencia del "masaje clásico" occidental, que se concentra en la relajación de los músculos y la estimulación de la circulación linfática y sanguínea, el masaje de meridianos y la acupuntura pretenden sobre todo equilibrar la circulación energética del cuerpo. Al igual que el masaje occidental, las técnicas de masaje del Extremo Oriente relajan y desintoxican la piel, el tejido conjuntivo y los músculos, pero la regulación del flujo del Qì también armoniza el sistema nervioso autónomo, el metabolismo y las funciones de los órganos internos.
Un concepto básico de la medicina china es que el cuerpo y la mente son inseparables. Siguiendo este pensamiento, las emociones y las funciones mentales tienen su origen en los órganos internos: el flujo de la energía vital Qì determina así fundamentalmente nuestro bienestar: La salud física, mental y emocional depende del flujo del Qì en los meridianos de cada órgano. Por lo tanto, el masaje de meridianos, la acupresión y la acupuntura no sólo tienen un efecto regenerador y revitalizante sobre el cuerpo, sino también sobre nuestra mente y nuestras emociones: especialmente nuestros sentimientos más profundos, que a menudo están superpuestos por el ritmo de la vida cotidiana, vuelven a percibirse de forma más consciente.
Una rutina diaria caracterizada por el estrés y el ajetreo provoca bloqueos y paradas de energía. Por lo tanto, la estimulación del flujo del Qì a través de los masajes en los meridianos tiene un efecto holístico sobre nuestra salud y nuestra actitud ante la vida.

Los masajes en los meridianos pueden ayudar con varios problemas como :
Dolores de cabeza, trastornos digestivos, falta de concentración, trastornos del sueño, asma, tinitus, síndrome premenstrual, estrés y tensión, desgana, fatiga y otros.

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